domingo, 30 de marzo de 2025

Lehder padre y Lehder hijo. El fallido camino de la reintegración familiar

 

 

 

Guillermo Lehder                               Carlos Lehder

Fotos de Univisión Noticias y el Espectador

 

 

“ Yo me sentía manchado, marginado y opté por irme para Medellín…”[1]

Carlos Lehder

 

Con la salida de Carlos Lehder de la cárcel y con su regreso a Colombia, lejos de interesarme si le debe algo a la justicia colombiana o no, me hago varias preguntas: ¿cómo llegó a ser uno de los narcotraficantes más poderosos de América Latina? ¿que lo llevó a ello? ¿pudo él o su familia haberlo evitado?; y otra pregunta que será objeto de un segundo artículo: ¿en qué se transforma una persona que ha estado encerrada durante 11.880 días y noches de su vida? Obviamente, se ha transformado, pero ¿en qué?, debe haber mutado de epidermis, en el cuerpo y en alma, producto de la espera, la esperanza y la desesperanza, el perder todo, pues en la cárcel, todo se pierde, es un perder permanente, 33 navidades perdidas, 33 cumpleaños perdidos… ¿Quién es hoy Carlos Lehder?

A continuación, me ocuparé de la primera inquietud, ¿qué o quién pudo haber salvado a Carlos Lehder de la vida que llevó?, ¿pudo haber sido un ciudadano normal y corriente en Colombia, país de origen de su madre Elene, o en Alemania, país de su padre Guillermo?

La niñez e infancia de Carlos Lehder estuvo marcada por la prosperidad económica de su familia en Armenia, Colombia, y el fracaso económico producto de la persecución contra los alemanes que los EE UU implantaron en Colombia en la Segunda Guerra Mundial, lo que produjo que a su padre le quitaran todo lo que tenía en Colombia, quedando en banca rota, siendo considerado un peligro nazi para los colombianos[2]. Esto último alimentó, en Lehder un sentimiento anti norteamericano, de activismo y beligerancia que lo caracterizó en el Cartel de Medellín.

La carrera delictiva de Carlos Lehder se inicia a los 19 años en los EEUU, cuando por posesión de 300 libras de marihuana y conspiración de carros robados es condenado a dos años de cárcel. Lehder, aún, no conocía la cocaína. [3]

Al salir de prisión luego de pagar la condena, regresó a casa de sus padres, donde le abrió la puerta su padre Guillermo, quien sabía que su hijo acababa de salir de la cárcel. Éste le preguntó que qué pensaba hacer y Carlos le respondió que regresar donde ellos, a casa, a lo que Guillermo le respondió, que, en su techo, o sea la casa de los padres de Carlos, no podía recibir un delincuente, pues su cultura alemana no le permitía dar albergue a un criminal, a un convicto… “Yo me sentí manchado, marginado y opté por irme para Medellín y allí empezó todo el episodio de la exportación de cocaína” [4]

Con ese portazo de Guillermo, Carlos toca la puerta de otra “casa”, la cual le abrieron de inmediato: la del Cartel de Medellín. Es así como Carlos Lehder se convierte, con los años, en uno de los jefes del Cartel más violento y criminal que se tenga noticias.

¿Qué habría pasado si Guillermo su padre le hubiera abierto la puerta de su casa? ¿Carlos habría parado su carrera delictiva que recién iniciaba?

 

Según JOHN BRAITHWAITE, sí.

El australiano J. Braithwaite, ha desarrollado la teoría sociológica de la vergüenza reintegrativa[5]:

-          En la que se reprocha el acto criminal pero no a la persona que lo cometió.

-          En la que hay desaprobación familiar y comunitaria al acto cometido, pero, seguida de gestos de reaceptación del sujeto que incurrió en tal conducta.

-          Donde se aplica el juego armónico entre la desaprobación y la reaceptación.

-          En la que se evita la humillación, la desintegración, la reacción social negativa y la estigmatización.

-          Donde el arrepentimiento, logra el olvido y el perdón.

-          Teoría en la que la vergüenza aparece cuando falla la conciencia, y a la vez se convierte, aquella, en constructora de ésta.

-          Finalmente, la vergüenza reintegrativa, puede evitar el inicio de la carrera criminal.[6]

 

Es muy difícil prever lo que hubiera pasado con la vida de Carlos (hijo) si Guillermo (padre), no le hubiera cerrado la puerta, cuando recién salió de la cárcel por primera vez, siendo un joven avergonzado, arrepentido, que buscaba el calor de hogar y el perdón familiar, pero casi con absoluta seguridad, creo, que su suerte hubiera sido otra.

Esto pasa hoy en Colombia en núcleos familiares autoritarios e intolerantes, por fortuna cada vez menos, donde expulsan de la familia a las hijas adolescentes porque quedan embarazadas, a los hijos por que consumen droga, y qué decir de los que salen de la cárcel, nunca se les vuelve a recibir,  quedando a merced de las bandas del barrio y la criminalidad organizada.

A este punto, vale la pena recordar las palabras del poeta colombiano Guillermo León Valencia[7]:

 

¿Quién me dirá si un huevo es de torcaz o víbora? La mente no sabe leer lo que en el tiempo asoma: el hombre, como el huevo, en nidos de dolor será serpiente, ¡en nidos de piedad será paloma!

 

Adenda.

ATENCIÓN. El juzgado 02 de control de garantías legalizó la captura del excapo del cartel de Medellín, Carlos Lehder, y expidió la boleta de detención provisional en su contra.

El lunes 31 de marzo, Lehder será puesto a disposición del juzgado 18 de ejecución de penas y medidas de seguridad de Bogotá , que resolverá situación jurídica. (La w Radio Colombia).



[1] Entrevista de Carlos Lehder, en la W Radio. 15 de enero de 2024.

[2] Declaración del cónsul de Estados Unidos en Cali, Howard E. Bowma. Guillermo Lehder:

El padre de Lehder. Por GERARDO REYES.

[3] Entrevista de Carlos Lehder. en la W Radio. 15 de enero de 2024.

[4] Ibidem

[5] BRAITHWAITE, JOHN. "Crime, Shame and Reintegration". Cambridge, Univ. Press, Redwood, Ltd. London,

1989:

[6] Langon Cuñarro , Miguel LA TEORÍA DE LA VERGÜENZA REINTEGRATIVA DE JOHN BRAITHWAITE

[7] Guillermo Valencia. Anarkos. Poema.

jueves, 11 de agosto de 2016



LA CONFIANZA, el posconflicto y la paz en Colombia.           

Por Juan Guillermo Sepúlveda A. [1]

Los Acuerdos de la Habana entre el Gobierno y el grupo insurgente de las Farc-Ep son generadores de confianza ciudadana? Es la respuesta que todos esperan que se responda de manera positiva pues de ello depende en gran medida el éxito de tan importante hecho, que será el punto de quiebre de la democracia en Colombia.

El diario el Tiempo alerta sobre la confianza y su rol en los Acuerdos de la Habana: “La generación de confianza es uno de los escollos por superar ante la eventualidad de un acuerdo de paz.”[2].  

El Ministro Consejero para el Postconflicto, Derechos Humanos y Seguridad de Colombia, propone un Estrategia para atender el tema de la confianza a la que denominó: “Respuesta Rápida”:
 ”Una estrategia de estabilización y generación de confianza en la paz.” Esta estrategia ya cuenta con 470 millones de dólares [3] y tienen varios proyectos concretos  entre los que están “proyectos concretos de generación de ingresos; ampliación de servicios de crédito y asistencia técnica agropecuaria; mantenimiento y construcción de vías terciarias; ampliación de los servicios de justicia formal y alternativa para que los ciudadanos del rural disperso y de zonas vulnerables tangan mayor asistencia en la resolución de disputas; refuerzo de medidas que prevengan el uso e involucramiento de jóvenes en actividades criminales; la focalización de medidas de reparación a víctimas en zonas vulnerables; la construcción de agendas comunitarias de seguridad pública; la inclusión de un enfoque de género en el servicio de policía; entre otros”. [4]

La Estrategia de Respuesta Rápida –ERR-, la piensa iniciar el gobierno al día siguiente de la firma de los Acuerdos en la Habana y tendrá una duración de 18 meses, pues en palabras del Ministro del Posconflicto, los procesos de paz tienen un alto riesgo de fracasar en el primer año del inicio del posconflicto. No está claro si la ERR fue acordada desde la Habana, o es una iniciativa unilateral del Ministerio del Posconflicto, pues si es esto último podría ir en contravía de lo acordado en la Mesa de negociación. 

¿Será que con esos proyectos, con esos recursos y en ese tiempo, el gobierno va a recuperar la confianza en las comunidades del posconflicto que habitan en regiones apartadas de los centros urbanos, donde no ha habido Estado durante mas de 50 años?

Me viene a la memoría un artículo del Catedrático español Salvador Cardús cuando hizo una disertación entre el concepto de seguridad y el de confianza, que nos cae como anillo al dedo en relación a lo que estamos viviendo en Colombia. Veamos algunas reflexiones de cómo restaurar la confianza en momentos de crisis social y su relación con el contexto nacional que estamos y vamos a vivir, en especial dirigido a las comunidades de base donde se va a desarrollar el posconflicto, que las llamo en el artículo comunidades del posconflicto.

-        Dice Cardúas citando a N. Luhmann: “No es humanamente posible tener un control racional de toda la complejidad del mundo que vivimos, por esta razón, la confianza se convierte en la gran virtud social que permite reducir tal complejidad hasta  el punto de, simplificándola, ser capaces de enfrentarnos al mundo.” [5]


¿Cómo simplificarle en Colombia, a las comunidades el fin del conflicto armado en temas tan complejos como:  - Desarrollo Agrario Integral. - Participación en Política. - Drogas ilícitas. - Víctimas. - Fin del conflcito. - Implementación, verificación y refrendación, para que puedan enfrentar el posconflicto que se avecina y poder construir una paz estable en sus territorios?. ¿Será que el Gobierno alcanza a ser en pocos días lo que la Corte Constitucional le ordenó de dar a conocer lo acordado en la Habana, en todos los punto cardinales del país y traducidos en las lenguas nativas de las diferentes comunidades indígenas que poblan a Colombia?.

-        “ ..paradójicamente la confianza no reside en la seguridad sino en el riesgo.  La simplificación de la vida se consigue por la aceptación del riesgo, no por el aumento de la seguridad” [6]. (afirma Cardús)

En lo que va acordado en la Habana, unos 8000 insurgentes se concentrarán en las Zonas Veredales –ZV- y en los Campamentos –C-, durante 180 días a partir de la firma de los Acuerdos, plazo en el cual deben salir desarmados. La seguridad brindada a los guerrilleros se dará a través de fuerzas nacionales e internacionales; 120.000 efectivos del  ejército y la armada nacional, acompañados por un despliegue de inteligencia pocas veces visto en el país denominado “TAC”, focalizado en cada región, con toda la visualización satelital, la inteligencia histórica, la actividad de la comunidad, de la geografía y el ambiente. La información del estado de dichas zonas se desplega desde un comando local, hacia uno regional, y éste al Comando Nacional de Monitoreo, que a su vez le reporta directamente a Juan Manuel Santos y Ban-Ki Moon. Todo lo anterior bajo un mecanismo de verificación internacional[7].

Las preguntas que se me ocurren es ¿dónde esta la seguridad de los miles de campesinos que hacen parte de los territorios donde impuso la “seguridad” las Farc-Ep durantes décadas?. ¿Cuáles fueron los mecanismos de prevención y seguridad que la Estrategia de Respuesta Rápida –ERR ha previsto, para evitar que las comunidades y territorios despejados por la guerrilla sean tomados por grupos al margen de la ley, entre los que se encuentra el ELN y los que no se van a desmobilizar de las Farc-Ep?. ¿Qué proyectos se ejecutarán en la ERR que lleve  a las comunidades del posconflicto a aceptar el riesgo que se les avecina, riesgo a convivir con el que uso la violencia (el desplazamiento, el reclutamiento forzado, etc) como herramienta de control social; el riesgo a creer en un nuevo orden social propuesto por un Estado de Derecho que nunca han conocido y riesgo a vivir dentro de un posconflicto que poco o nada entiende, pues nadie se lo ha sabido explicar?.

-        “ La confianza- siguiendo a Luhmann – se restaura con mecanismos sociales que permitan aceptar de nuevo el riesgo de la vida social.” [8] Estos mecanismos sociales en momentos de crisis deben producir liderazgo, reafirmar el buen funcionamiento de las instituciones, fortalecer la transparencia y desarrollar vínculos afectivos y emocionales, solo así se puede restablecer la confianza social.


En la Colombia del Posconflicto se estará pensando desde las ERR, trabajar con las comunidades campesinas del posconflicto para crear nuevos liderazgos sociales, políticos y morales y evitar así que estos liderazgos sigan siendo “farianos”?. Se estará promoviendo la creación de instituciones lo suficientemente transparentes, que permitan la participación, la descentralización y el empoderamiento de las comunidades campesinas de base, que les permitan el desarrollo de sus afectos, emociones y sentido de pertenencia en Tibú, Ituango, Villa Rica, San Vicente del Caguán, Caldono, Tumaco, Cumaribo, Tierra Alta, la Macarena o Puerto Colombia, entre otras muchas regiones olvidadas por el Estado y hoy visibilizadas por el posconflicto?.

Para finalizar, dejo constancia que creo en las formación pacífica de resolver los conflictos vengan de donde vengan, pero ello requiere tiempo y recursos para el posconflicto, bases sociales que lo legitimen y gobiernos que le den permanencia, y mucho me temo que de ello poco tiene el proceso de paz que está construyendo el gobierno colombiano. Pues en 18 meses no se produce confianza en regiones donde no la ha habido en 50 años; no esta claro de dónde saldrán los recursos para financiar el posconflicto según alerta la Andi y ProAntioquia[9]; las comunidades campesinas del posconflicto son las menos enteradas del tema, por lo que poca legitimidad le darán a los Acuerdos, y de llegar a la Presidencia de la República en las próximas elecciones el que anuncian la mayoría de cábalas políticas, poco apoyo y permanencia le dará a lo pactado en la Habana.



Ojalá esté equivocado.



[1] Reconocido por la Organización de Estados Americanos -OEA- como Experto en Medidas de Fomento de la Confianza y la Seguridad  y Director de la Asociación Colombiana Justicia para la Convivencia. Asesor en temas de seguridad y convivencia ciudadana. juanguillermo.sepulveda@gmail.com  

[3]Ministerio del Posconflicto alistaría 470 millones USD para “Estrategia de Respuesta Rápida”” http://politika.com.co/ministerio-del-posconflicto-alistaria-470-millones-usd-para-estrategia-de-respuesta-rapida/

[5] Salvador Cardus i Rios, Periódico la Vanguardia de España, 3 de Octubre del 2001.
[6] Ibidém.
[8] Ibidém